El cuidado del cabello es esencial para mantener su salud y aspecto. Sin embargo, muchas personas, sin saberlo, adoptan hábitos que pueden dañar su cabello. Conocerlos y cambiarlos puede hacer que tu pelo esté más sano y brillante. Aquí tienes 30 malos hábitos que pueden estar arruinando tu pelo, junto con consejos prácticos que te ayudarán a hacer cambios positivos.
1. Acondicionador de saltos
Descuidar el acondicionador priva al cabello de hidratación, lo que provoca encrespamiento y rotura. El acondicionador ayuda a sellar la cutícula capilar y mantiene la hidratación. Úsalo después de cada lavado para mantener la suavidad y el brillo. ¿No tienes tiempo? Prueba una opción sin aclarado para una hidratación rápida.
2. Lavado excesivo del cabello
Lavar el pelo a diario puede eliminar los aceites naturales y dejarlo seco y sin brillo. Procura hacerlo cada dos días o incluso menos. El champú en seco puede prolongar el tiempo entre lavados, manteniendo el cabello fresco sin resecarlo en exceso. Ajústalo a las necesidades de tu tipo de cabello.
3. Uso de agua caliente
El agua caliente abre las cutículas del cabello, lo que provoca la pérdida de humedad y daños. Opta por el agua tibia para proteger los aceites naturales del cabello. Termina con un aclarado frío para sellar las cutículas y potenciar el brillo. Tu pelo estará más vivo y menos quebradizo.
4. Cepillar el pelo mojado
El pelo es más débil cuando está mojado, y el cepillado puede provocar roturas importantes. Utiliza un peine de púas anchas para desenredar suavemente. Empieza por las puntas y ve hacia arriba. Aplica un spray desenredante para facilitar el proceso y proteger el cabello de posibles daños.
5. Usar lazos de pelo apretados
Las gomas de pelo apretadas provocan tensión y rotura en la línea del cabello. Opta por cintas suaves y sin costuras para reducir la tensión. Ata el pelo sin apretar para minimizar los daños. Las alternativas que no dañan el cabello, como los coleteros o las gomas en espiral, pueden ayudar a mantenerlo sano.
6. Tratamientos químicos
Los tratamientos químicos frecuentes, como la coloración o la permanente, debilitan la estructura del cabello. Limita estos procesos y cuídalo adecuadamente entre tratamiento y tratamiento. Utiliza mascarillas y aceites nutritivos para reponer la hidratación. Un cabello sano necesita tiempo para recuperarse de la exposición química.
7. Descuidar el cuidado del cuero cabelludo
Ignorar la salud del cuero cabelludo puede provocar caspa y debilitar las raíces del cabello. Exfolia regularmente el cuero cabelludo para eliminar las acumulaciones y estimular la circulación. Incorpora masajes en el cuero cabelludo con aceites esenciales para favorecer el crecimiento sano del cabello y mantener un entorno equilibrado en el cuero cabelludo.
8. Dormir con el pelo mojado
Dormir con el pelo mojado aumenta el riesgo de rotura. El pelo mojado es frágil y propenso a dañarse. Sécate el pelo antes de acostarte o utiliza una funda de almohada de seda para reducir la fricción. Estos pequeños cambios pueden evitar las puntas abiertas y mantener el cabello en su mejor estado.
9. Saltarse los cortes de pelo
No cortarse el pelo con regularidad provoca la aparición de puntas abiertas y un crecimiento poco saludable. Córtalo cada 6-8 semanas para mantener la salud del cabello y favorecer su crecimiento. Recortar el pelo con regularidad evita que las puntas abiertas suban por el tallo capilar y mantiene el cabello fresco y fuerte.
10. Uso excesivo de herramientas térmicas
El peinado con calor excesivo debilita el cabello, provocando sequedad y rotura. Utiliza siempre un spray protector del calor antes de peinarte. Limita el uso de herramientas térmicas a una vez por semana para preservar la salud del cabello. Adopta estilos naturales para reducir la dependencia del calor.
11. Cepillado excesivo
Un cepillado excesivo puede provocar la rotura del cabello y la aparición de puntas abiertas. Cepíllalo sólo cuando sea necesario y utiliza un cepillo de cerdas suaves para minimizar el estrés. Sé delicado, sobre todo con los enredos. Menos es más cuando se trata de mantener un cabello sano.
12. Usar champús fuertes
Los champús agresivos despojan al cabello de sus aceites esenciales y provocan sequedad. Opta por fórmulas suaves sin sulfatos que limpien sin resecar en exceso. Asegúrate de que tu champú se adapta a las necesidades de tu cuero cabelludo. Este cambio puede hacer que tu pelo esté más sano y manejable.
13. Omitir el protector térmico
Los protectores térmicos protegen el cabello de los daños térmicos. Si no lo haces, tu pelo se volverá quebradizo y dañado. Aplica siempre un protector antes de utilizar cualquier herramienta de peinado con calor. Es un paso sencillo que puede marcar una gran diferencia a la hora de mantener la salud del cabello.
14. No hidratarse lo suficiente
La deshidratación afecta a la salud del cabello, volviéndolo seco y quebradizo. Bebe mucha agua a diario para mantener el cabello hidratado desde dentro hacia fuera. Un cuerpo bien hidratado favorece el crecimiento y el aspecto saludable del cabello. Prioriza el agua a la cafeína por el bien de tu cabello.
15. Elección incorrecta del cepillo
Elegir el cepillo equivocado puede provocar roturas y encrespamiento. Opta por cepillos con cerdas naturales para obtener resultados más suaves. Adapta el tipo de cepillo a la textura y longitud de tu cabello. La herramienta adecuada puede mejorar significativamente el aspecto de tu cabello.
16. Sombreros ajustados y diademas
Llevar sombreros o diademas apretados puede tensar el cabello y provocar roturas. Opta por opciones más sueltas para minimizar la tensión. Deja que tu pelo respire y se recupere. Los días sin sombrero pueden ayudar a mantener el cuero cabelludo y las entradas sanos.
17. Descuidar las mascarillas capilares
Las mascarillas capilares nutren y reparan el cabello, pero muchas se saltan este paso. Utiliza una mascarilla cada semana para restaurar la hidratación y la fuerza. Déjala actuar el tiempo recomendado para obtener los máximos beneficios. Un uso constante puede devolver la vida al cabello apagado y dañado.
18. No proteger el cabello al sol
La exposición al sol daña el cabello, provocando sequedad y decoloración. Ponte un sombrero o utiliza productos con protección UV. Mantén el cabello hidratado y protegido de la luz solar directa. Estas precauciones pueden ayudar a mantener el color vibrante y la textura saludable de tu cabello.
19. Peinados apretados frecuentes
Los peinados tirantes sobrecargan el cabello y lo rompen. Opta por peinados más sueltos o alterna entre peinados tirantes y sueltos. Dale a tu pelo un respiro de la tensión constante. Ayuda a preservar la fuerza del cabello y a prevenir el deterioro de su salud.
20. Ignorar las puntas abiertas
Ignorar las puntas abiertas daña aún más el tallo capilar. Recortarlas con regularidad evita este problema y mantiene las puntas sanas. Consulta a un estilista para conocer los horarios de recorte. Cuidar las puntas abiertas puede mejorar significativamente el aspecto general de tu cabello.
21. Técnicas inadecuadas de secado del cabello
Utilizar el secador de forma inadecuada puede causar daños por calor. Sujétalo a cierta distancia y muévelo continuamente para distribuir uniformemente el calor. Utiliza el ajuste de calor más bajo posible. Estas técnicas pueden evitar daños innecesarios, manteniendo tu pelo suave y vibrante.
22. Uso excesivo de champú seco
Confiar demasiado en el champú seco provoca la acumulación de suciedad en el cuero cabelludo y un cabello apagado. Utilízalo con moderación y sigue las instrucciones. Es una solución temporal, no un sustituto del lavado. Su uso ocasional es lo mejor para mantener el cabello fresco entre lavados.
23. No aclarar bien el champú
Los restos de champú irritan el cuero cabelludo y apelmazan el cabello. Aclare a fondo para eliminar todo el producto. Asegúrate de sentir el cuero cabelludo limpio y sin espuma. Un aclarado adecuado deja el cabello más ligero y sano, minimizando la posibilidad de que se acumulen residuos.
24. Cepillado de raíces a puntas
Cepillar de la raíz a las puntas puede empeorar los enredos y provocar roturas. Empieza a desenredar desde las puntas hasta las raíces. Este método suave minimiza los daños y mantiene el pelo más sano. La paciencia durante el cepillado ayuda a evitar la rotura indeseada del cabello.
25. No utilizar productos sin aclarado
Los acondicionadores sin aclarado proporcionan hidratación y protección continuas. Omitirlos puede dejar el pelo seco y rebelde. Aplícalo después del lavado para aumentar la hidratación y facilitar el desenredado. Su uso constante mejora la suavidad y elasticidad del cabello, facilitando el peinado.
26. Usar planchas de pelo a diario
Utilizar planchas de pelo a diario puede dañar gravemente tu cabello. El calor debilita los folículos pilosos y provoca roturas y falta de brillo. En lugar de usarlas a diario, intenta limitar el uso de las planchas a ocasiones especiales. Utilizar productos protectores del calor también puede minimizar los daños.
27. Uso excesivo de productos de peluquería
El uso excesivo de productos de peinado puede apelmazar el cabello y provocar la acumulación de residuos. Esto puede hacer que el pelo parezca graso y apagado. Intenta utilizar productos con moderación, aplicando sólo lo necesario para conseguir el look deseado.
28. Uso de cepillos sucios
Los cepillos sucios devuelven la grasa y los residuos al cabello. Límpialos con regularidad para garantizar una salud capilar óptima. Retira el pelo del cepillo después de cada uso y lávalo mensualmente. Unas herramientas limpias contribuyen significativamente a mantener un cabello limpio y sano.
29. Descuidar la dieta y la nutrición
Una dieta inadecuada afecta a la salud del cabello. Incluye en tu dieta alimentos ricos en nutrientes como frutas, verduras y proteínas. Una nutrición equilibrada favorece el crecimiento y la fortaleza del cabello. Una dieta sana se refleja en un pelo fuerte y vibrante y contribuye al bienestar general.
30. Uso inadecuado de accesorios para el cabello
Las gomas elásticas apretadas y los accesorios metálicos para el pelo pueden provocar tensión y rotura, sobre todo si se usan con frecuencia. Optar por alternativas más suaves, como los coleteros de seda, puede reducir considerablemente estos riesgos. Elegir los accesorios adecuados no sólo previene daños, sino que también favorece la salud y el aspecto general de tu cabello. Estos pequeños cambios pueden suponer una gran diferencia en la resistencia de tu cabello.