¡Es hora de transformar tu cabello! Se acabaron las puntas rotas y enredadas. Se acabaron los cabellos finos, frágiles y sin vida.
La cruda realidad es que la textura de tu pelo está inscrita en tu ADN. Lamentablemente, eso significa que no existe una forma mágica de cambiar el tipo de cabello. Sin embargo, lo que sí puedes hacer es que sea visualmente más grueso, brillante y bonito. Y lo que es más importante, ¡puedes hacerlo más sano!
20 consejos y trucos para un pelo más sano
1. Conoce tu cabello
Para empezar tu viaje por el cuidado del cabello, lo primero es saber a qué te enfrentas, ¿verdad? Para ello, tienes que conocer tu cabello. O para ser más precisos, tienes que conocer tu tipo de cabello.
¿Tiene el pelo fino, grueso, rizado o liso? ¿A qué te enfrentas? Una vez obtengas esas respuestas, sabrás exactamente qué tipo de cuidados necesita realmente tu cabello.
2. Menos calor en el cabello
Como peluquera, lucho cada día por reavivar el cabello dañado. ¿Y sabes cuál es la causa número uno de la rotura del cabello, las puntas abiertas y el cabello seco? El calor excesivo.
No te preocupes, no estoy aquí para juzgarte. Sé que las planchas y los rizadores pueden salvarte la vida de vez en cuando. Sí, te ayudan a peinarte y arreglarte el pelo en un santiamén. Pero, ¿a qué precio?
Seguro que no tenías ni idea de que exponer el cabello a demasiado calor puede provocar fácilmente una alteración de las hebras de queratina de tu cabello. ¿No tienes ni idea de lo que esto significa? Bueno, para poner las cosas simples: terminas teniendo un cabello dañado y más débil.
Si realmente no puedes vivir sin rizadores o planchas, hazle un favor a tu pelo y, al menos, úsalos lo menos posible.
3. Coleteros en lugar de gomas apretadas
Además de ser un bonito accesorio para el pelo, los coleteros vuelven a estar de moda. Pero eso no es lo más importante.
Lo que importa es que son la opción más sana para atarse el pelo. Tienen un efecto menos dañino sobre el cabello, sobre todo en comparación con las gomas apretadas que lo rompen. Además, los coleteros enredan menos el pelo.
4. Cuidado con el pelo mojado
El pelo mojado es más sensible que el seco, debido a que los enlaces que forma son más débiles. Por lo tanto, es más probable que se dañe.
Por eso debes tener mucho cuidado al desenredar el pelo mojado, a menos que quieras provocar más roturas. Además, asegúrate de peinarte desde las puntas hacia las raíces.
5. Las fundas de almohada adecuadas
Te sorprenderían los efectos beneficiosos de las fundas de almohada de seda o satén para tu pelo. Ambos tejidos son suaves y, por tanto, causan menos fricción. En consecuencia, hay menos rotura de cabello.
Justine Marjan, peluquera de famosos, afirma que "la fricción del algodón puede alterar la capa de la cutícula, lo que provoca encrespamiento, rotura, pliegues durante el sueño y hebras secas". Y si Khloe Kardashian y Hailey Bieber la creen, ¿por qué nosotras no?
6. Seca tu pelo con mucho cuidado
El secado al aire es la mejor opción, de eso no hay duda. Pero, por desgracia, no siempre tienes el tiempo o las condiciones para dejar que tu pelo se seque solo.
Te guste o no, tienes que usar secador. Y es entonces cuando debes extremar las precauciones.
En primer lugar, desenreda el pelo. Después, no olvides utilizar un protector térmico. A continuación, separa el pelo en secciones y sécalo de una en una.
7. Mantener el cuero cabelludo graso
No te pongas demasiado aceite en el cuero cabelludo, hasta el punto de que tu pelo parezca graso. Sin embargo, si quieres tener un pelo sano, debes mantener el cuero cabelludo hidratado.
De lo contrario, sufrirás sequedad, descamación o picores en el cuero cabelludo. Como consecuencia, tendrás el pelo seco y sin vida.
8. Lávate el pelo con agua fría
El agua caliente puede ser mejor para eliminar la suciedad, la grasa o los productos de tu pelo. Sin embargo, el agua fría es mucho más saludable. Florian Hurel, peluquero de famosos, afirma: "Lavarse el pelo con agua fría ayuda a cerrar la cutícula después del lavado. Esto también tiene el beneficio añadido de ayudar, junto con tus productos de cuidado capilar, a que tu pelo luzca fuerte y brillante, ¿y quién no quiere eso?".
9. Cepíllate el pelo con precaución
Todos somos culpables de cepillarnos el pelo de arriba abajo. Pues bien, todos los expertos capilares te dirán lo mismo: esta es la forma más rápida de dañar y quebrar tu pelo.
En su lugar, empieza por el centro y cepilla hacia las puntas. Además, no olvides
10. Elegir el champú adecuado
¿Recuerdas que te dije que tienes que conocer tu tipo y textura de pelo? Pues bien, ahora es el momento de elegir el champú adecuado, basándote en esa información.
Lo que necesitas es un champú que responda a las necesidades específicas de tu cabello. Por suerte, la mayoría de las marcas lo especifican en el envase.
11. Aprender a utilizar el acondicionador
Usas acondicionador después del champú, así que ¿a qué viene tanta ciencia? Aquí tienes más trucos profesionales para sacar el máximo partido al acondicionador.
En primer lugar, no apliques el acondicionador sobre el pelo mojado, a menos que quieras que se deslice. Aplica el acondicionador uniformemente y ponlo sólo en las puntas del pelo. Déjalo actuar un par de minutos para que el pelo lo absorba. Por último, no olvides aclararlo bien.
12. Chuletas normales
Si te gusta el pelo largo como a mí, ¡cada centímetro es precioso! Sin embargo, no puedes tener un pelo sano si no cortas las puntas abiertas con regularidad.
El pelo recién cortado no sólo tiene un aspecto más sano y atractivo, sino que también ayuda a desenredarlo. Y sí, el mito es cierto: cortarse el pelo favorece el crecimiento.
13. No te laves el pelo con demasiada frecuencia
¿Con qué frecuencia hay que lavarse el pelo? Mi experiencia me ha enseñado que la respuesta más óptima es dos veces por semana.
Lavarse el pelo todos los días no lo dejará más sano ni con más volumen. De hecho, acabarás lavando demasiado tu grasa natural. En consecuencia, acabarás con el pelo seco y más propenso a quebrarse.
14. Reducir el estrés
Tu cabello forma parte de ti. Por lo tanto, es natural que el estado interno de tu organismo afecte también a tu cabello.
De hecho, el estrés es la principal causa de caída del cabello, tanto en hombres como en mujeres. Científicamente, el estrés hace que los folículos pilosos entren en una fase de reposo. Esto significa que esos pelos se romperán o caerán con el tiempo.
15. Una dieta equilibrada
Tú cuidas tu pelo desde "fuera". Pero para que crezca, necesita proteínas, vitaminas y minerales. En pocas palabras, debes comer sano para tener un pelo sano.
Una dieta equilibrada debe incluir muchos huevos, bayas, cítricos, verduras de hoja, frutos secos, semillas, soja y zanahorias.
16. No utilices demasiados productos para el cuidado del cabello
¿Sabías que un exceso de productos capilares puede tener un efecto contraproducente? Esto es especialmente cierto en el caso de geles, lacas y otros productos de peinado.
Demasiada proteína o hidratación hará que tu pelo se rompa. Además, algunos productos pueden causar daños químicos a tu cabello.
Por eso es fundamental encontrar el equilibrio perfecto. Encuentra los productos que mejor se adapten a tu cabello y no te separes de ellos.
17. Cepíllate el pelo antes de lavarlo
Si quieres tener un pelo sano y sin enredos, no olvides cepillarlo antes de lavarlo. Ya hemos comprobado que el pelo mojado es más frágil, así que es la mejor forma de protegerlo.
Además, te resultará más fácil aplicar el champú y el acondicionador sobre el pelo desenredado y cepillado. De este modo, no tendrás que frotar el champú. En su lugar, podrás frotarlo suavemente en el cuero cabelludo.
18. Protege tu cabello
Seguro que utilizas diferentes tipos de productos para proteger tu piel de los efectos nocivos del sol. Pues bien, ¿qué te hace pensar que tu pelo no requiere también el mismo tipo de protección?
No hablo sólo de productos de protección solar para el cabello. ¿Qué pasa con el viento? ¿La suciedad? ¿La contaminación? ¿La lluvia?
Me refiero a proteger físicamente el pelo del entorno, por ejemplo con un sombrero o un paraguas. Créeme: tu pelo te lo agradecerá.
19. Cuidado con las trenzas o tejidos apretados
Sé lo que debes pensar: cuanto más apretadas estén tus trenzas, más durará tu peinado. Pero, ¿se te ha ocurrido alguna vez lo perjudiciales que son estos peinados para la salud de tu cabello?
En realidad es bastante sencillo: las trenzas y los tejidos apretados crean demasiada tensión y presión en el cuero cabelludo. Pueden provocar la rotura o incluso la caída del cabello.
20. Deje que el profesional haga su trabajo
No hay nada malo en secarse el pelo en casa o incluso recortar las puntas abiertas. De hecho, te ahorrará tiempo y dinero.
Pero, por favor, ni se te ocurra cambiar el color de tu pelo, decolorarlo o aplicarte un tratamiento capilar de queratina por tu cuenta. Lo más probable es que acabe quedando fatal, pero eso ni siquiera es lo peor.
¡Acabarás dañando tu pelo sin remedio! Si no puedes permitirte una visita a la peluquería ahora mismo, ¡espera y no experimentes!
Los mejores tratamientos caseros para el cabello
Te damos una buena noticia: no hace falta gastarse una fortuna en tratamientos capilares de lujo para tener un pelo sano. La mayoría de los peluqueros no quieren que sepas que las mascarillas capilares caseras son incluso más eficaces que los productos más caros.
1. Mascarilla de aceite de coco y huevos
¿Cómo se hace?
- Mezclar y combinar 2 cucharadas de aceite de coco ecológico con 1 huevo batido
¿Cómo utilizarlo?
- Mójate el pelo
- Aplica la mezcla sobre el cabello húmedo
- Déjalo encendido durante 15-20 minutos
- Aclarar con agua tibia
¿Para qué sirve?
- Cabello seco, encrespado o rizado
- Mantiene el cabello hidratado
- Una fuente de proteínas
2. Mascarilla de aguacate
¿Cómo se hace?
- Pelar un aguacate y cortarlo en trozos
- Poner en una batidora con 3-4 cucharadas de miel y 3 cucharadas de aceite (puede utilizar aceite de coco, aceite de oliva o aceite para el cabello).)
- Mezclar y batir todo junto hasta que quede suave
¿Cómo utilizarlo?
- Aplica la mezcla sobre el cabello húmedo (especialmente en las puntas)
- Cúbrete el pelo con un gorro de ducha (el calor ayuda a que el pelo absorba mejor los ingredientes)
- Deje la mascarilla puesta durante 20-30 minutos
- Enjuáguelo
¿Para qué sirve?
- Lo mejor para el pelo rizado
- Revitaliza el cabello
- Los aceites naturales del aguacate sirven como acondicionador
3. Plátano, aceite de coco y miel
¿Cómo se hace?
- Mezclar 2 cucharadas de aceite de coco, 1 plátano maduro machacadoy 2 cucharadas de miel hasta que los ingredientes se mezclen
¿Cómo utilizarlo?
- Aplica la mascarilla sobre el cabello seco
- Ponte un gorro de ducha
- Déjalo encendido durante 15-20 minutos
- Aclarar abundantemente
¿Para qué sirve?
- Lo mejor para el cabello seco y dañado
- Hidrata el cabello
- Protege el cabello del sol
- Fuente de vitaminas y calcio
- Favorece el crecimiento del cabello
4. Mayo, yogur y aceite de almendras
¿Cómo se hace?
- Mezclar 2 cucharadas de aceite de almendras, 4 cucharadas de mayonesa y 1 taza de yogur griego hasta que todo esté mezclado
¿Cómo utilizarlo?
- Poner la mezcla sobre el cabello húmedo
- Masajear el cuero cabelludo de la raíz a las puntas.
- Déjalo encendido durante 20-30 minutos
- Aclarar abundantemente
¿Para qué sirve?
- Lo mejor para el cabello seco y encrespado
- Hidrata el cabello
- Aumenta la fuerza y la suavidad del cabello
5. Enjuague de sidra de manzana
¿Cómo se hace?
- Mezclar 3 cucharadas de vinagre de sidra de manzana con 15 onzas de agua
¿Cómo utilizarlo?
- Aplicar la mezcla sobre el cabello después del champú y el acondicionador
- Frótalo en el cuero cabelludo y en todo el cabello
- Déjalo encendido durante 2-3 minutos
- Aclarar con agua fría
¿Para qué sirve?
- Ideal para cabellos grasos y finos
- Suaviza el cabello
- Fortalece los folículos
- Desenreda el cabello
- Elimina el exceso de grasa del cuero cabelludo
Infografía: Consejos y trucos para un pelo sano
Preguntas frecuentes
¿Cómo saber si tu pelo no está sano?
- Puntas abiertas
- Sin brillo
- Sin elasticidad
- Rotura
- Falta de humedad
¿Por qué tu pelo no está sano?
- Genética
- Dieta desequilibrada
- Exceso de estilo
- Lavado excesivo
- Cepillado excesivo
- Productos capilares incorrectos
- Estrés
Principales conclusiones
- Elige los productos capilares adecuados según tu tipo y textura de pelo
- No te laves el pelo con demasiada frecuencia
- Di no al exceso de calor en el pelo
- Cambia tu dieta y tus hábitos de vida
- Deje algunas cosas a los profesionales